La moda es un mundo complejo y a veces inaccesible, pero el talento abre poco a poco las puertas y eso es lo que ha conseguido Juan Ángel Marín Guzmán, que con su colección, estrenada en noviembre, “La Madrugá” está consiguiendo numerosos reconocimientos. A finales de 2024 fue uno de los tres finalistas del concurso SPAM en Málaga en el que participaron 92 diseñadores, y este año ha sido seleccionado para participar en la próxima edición del Certamen Code 41 Talent, por lo que sus diseños desfilarán en la Real Fábrica de Artillería de Sevilla el próximo 13 de marzo. 
Además, varios artistas, como Ángeles Toledano y DeTeresa, le han pedido prendas para sus proyectos, lo que supone un gran orgullo para él. Anteriormente ha colaborado y trabajado para artistas y diseñadores como Ernesto Artillo, Niño de Elche, Leandro Cano y Luna Ki.
Según cuenta Marín, desde muy pequeño sentía un gran interés por la moda, principalmente motivado por la dedicación a la costura de su madre y su tía y el arte de sus abuelas con el ganchillo y el punto. A ello se sumó la dedicación de su hermana al modelaje, algo que lo entusiasmó y que le inculcó definitivamente la pasión por la moda y el diseño.
Estudió el bachillerato de arte en la Escuela José Nogué de Jaén y posteriormente en la Escuela Superior de Diseño de Madrid (ESD) donde creó su marca “Marín”. Posteriormente cursó un máster en Moda 3D en la Tecnocreativa.
Su primera experiencia profesional, apunta Marín, fue en Huelma, donde impartió un curso introductorio de patronaje. “A partir de ahí, comencé a realizar proyectos de estilismo, confección y diseño para obras de teatro, influencers, artistas y performances”, asegura, añadiendo que aunque ha sido un camino difícil, su pasión por lo que hace y el apoyo de su familia, lo mantiene motivado.
Su colección “La Madrugá”, dedicada a su querida abuela Juana Dolores García, está inspirada en la Semana Santa andaluza, en concreto en la de Huelma y en la procesión de la Madrugada de la Cofradía Penitencial Ntro. Padre Jesús Nazareno y Mª Stma. de la Amargura. Marín explica que cada look es creado desde conceptos como el calvario, el luto y la pasión de Cristo como parte del folclore andaluz, derivando en una simbiosis con la oscuridad de la noche así como un futuro en constante evolución. “La colección pretende capturar la esencia y devoción propias de la Semana Santa, presentando una visión personal, experiencial y contemporánea de esta festividad tradicional”, pone de relieve.
Con respecto a sus objetivos, Marín apunta que pretende seguir desarrollándome tanto a nivel personal como profesional. “Siempre estoy experimentando, creciendo y buscando nuevas formas de innovar. Quiero seguir aprendiendo y superándome, y nunca dejar de explorar nuevas ideas que me ayuden a evolucionar en mi carrera y mi marca”, concluye el diseñador de Huelma.
