92 idiomas diferentes en una ciudad de apenas 120.000 habitantes. Desde luego que la cifra es más que sorprendente. O visto de otra manera, un idioma por cada 1.300 habitantes. Perplejos nos quedamos. Ojipláticos. Y no sólo nosotros. Los propios precursores de este estudio, un grupo de investigadores de la Universidad de Jaén (UJA), dirigidos por el profesor Francisco Fernández García, creadores del “Catálogo de lenguas y censo lingüístico de la población extranjera estable en la ciudad de Jaén”.
Aunque estos datos son de mediados de 2011, las mismas fuentes parecen indicar que no distan mucho de la realidad de estos días. Algunas de las lenguas que se hablan son el árabe, el marroquí, el volofo, el chino mandarín, el guaraní o algunas otras tan difícilmente pronunciables como las bereberes: tamazight, el shelja y el rifeño.
Se trata, según los datos que se desprenden del estudio, de una proporción muy elevada, ya que, por ejemplo en Londres, con 7,5 millones de habitantes, se hablan 300 lenguas.
El estudio, realizado sobre una muestra de 1.379 encuestas a inmigrantes mayores de edad que no tienen el español como lengua materna o como única lengua materna, evidencia que en la capital jiennense se habla un idioma diferente por cada 1.300 habitantes. Estos datos corresponden a las conclusiones preliminares del proyecto de investigación ‘Catálogo de lenguas y censo lingüístico de la población extranjera estable de la ciudad de Jaén’, dirigido por Francisco Fernández García, profesor titular de la UJA. «No esperábamos encontrar esta cantidad de lenguas», afirma Fernández García.
La proporción es muy grande, incluso si se la compara con grandes ciudades como Londres donde se hablan unas 300 lenguas para una población de siete millones y medio de habitantes y con 800.000 alumnos extranjeros escolarizados. «Esto nos lleva a entender que el multilingüismo en el mundo no es sólo ya un fenómeno de grandes ciudades sino que, proporcionalmente respecto a las grandes urbes, en Jaén es muy grande», afirma el investigador.
Los datos obtenidos en la encuesta también reflejan que un tercio de la población extranjera de habla no hispana encuestada procede de Marruecos. La segunda nacionalidad con mayor implantación en Jaén entre los encuestados es la china y la tercera, la senegalesa, mientras que los inmigrantes hispanoparlantes proceden en su mayoría de Colombia y Ecuador.
Empadronados o no
La búsqueda de personas inmigrantes para realizar las encuestas se ha hecho «aplicando diferentes estrategias para diversificar los datos», afirma Fernández. El trabajo de campo se ha llevado a cabo puerta a puerta y se ha contado, además, con la colaboración de asociaciones de inmigrantes, el Ayuntamiento de Jaén, la UJA y la Subdelegación del Gobierno. «Nos consta que hemos encuestado a un alto porcentaje de la población no hispanohablante de la ciudad de Jaén (empadronada o no)», asegura el investigador.
El proyecto de investigación no sólo pretender elaborar un catálogo de lenguas y un censo sociolingüístico, sino que quiere sentar las bases a la hora de abordar intervenciones de integración de tipo lingüístico en la población: desde materiales pedagógicos adecuados para la enseñanza del español a la población extranjera hasta el apoyo a publicaciones en lenguas minoritarias que ayuden a cuidar la herencia lingüística de los inmigrantes.