Casi todos los amantes del cine del planeta sabrán reconocer enseguida esta el característico silbido de esta canción, que es el tema central de uno de los westerns más conocidos de la Historia: «La muerte tenía un precio». Aunque el autor de la banda sonora es Ennio Morricone, el músico que grabó este silbido fue un músico español que acababa de comenzar su carrera. Su nombre artístico es Kurt Savoy y se da la circunstancia de que es jiennense, ya que nació en Andújar en 1946.
Francisco Rodríguez, más conocido como Curro o Kurt Savoy, es considerado por muchos críticos como el mejor silbador del mundo, ya que es capaz de imitar cualquier tipo de sonido, desde rock, jazz, flamenco o el canto de un pájaro. Sus silbidos han aparecido en unos 130 anuncios y en un centenar de películas, entre las que se encuentran títulos míticos como «El bueno, el feo y el malo» o «Por un puñado de dólares». Además, su trabajo ha sido reclamado en numerosas ocasiones para aparecer en anuncios de televisión, de forma que sus silbidos pueden escucharse en un anuncio de Chanel o en un conocido spot del Renault Laguna del año 2001. También ha gradabo más de cuarenta discos en sus más de 50 años de carrera en el mundo de la música.
El secreto de este especial talento para su silbido es la característica forma de su dentadura que, según ha declarado en varias entrevistas, tiene asegurada en cerca de medio millón de euros.
Trayectoria de Savoy
Cuando era muy joven, ganó varios concursos musicales, por lo que comienza su trayectoria profesional en el mundo de la música a finales de los años 50. En 1961 inició una gira por España en la que se dio a conocer como «El rey del rock», ya que fue uno de los pioneros en la utilización de la guitarra eléctrica en nuestro país. Savoy comienza a colaborar con grandes nombres de la música a nivel mundial, como Paul Anka, Julio Iglesias o Antonio Molina y ékl llega a asegurar que el mismísimo Elvis Presley llegó a enviarle una carta porque quería conocer al autor de los impresionantes silbidos.
Además, este iliturgitano universal ha actuado por todo el mundo, ya que ha realizado giras por Europa, por Canadá, por el Sur de África o por Brasil, a lo que se une su actuación en auditorios tan emblemáticos como el Astor Center de Nueva York o el Teatro Olymplia de París.
Desde el año 1977 vive en Francia, donde se trasladó con su esposa, la torera Clarita Montes, nacida en la taurina ciudad de Nimes. Savoy es muy popular en el país galo, donde ha participado con sus silbidos en numerosas películas y anuncios para televisión. Recientemente ha alcanzado una mayor fama en España gracias a sus apariciones en el programa nocturno de Andreu Buenafuente.