Jaén es la provincia andaluza líder en la generación de energía hidráulica, una de las principales fuentes de energía renovable que existen en la actualidad. Según los datos de la Agencia Andaluza para la Energía, Jaén produce un tercio de toda la energía eléctrica procedente de saltos de agua en la comunidad andaluza, ya que cuenta con una capacidad de 212,22 megawatios sobre un total de 600 de toda la región. Tras Jaén se sitúa Málaga con 126 megawatios y a continuación se encuentra la provincia de Granada, con poco más de 95 megawatios.
En total, la provincia de Jaén cuenta con 23 centrales hidroeléctricas en funcionamiento, la mayoría de ellaas provechando los saltos de agua creados en diferentes embalses repartidos por toda la geografía jiennense. La planta con mayor potencia es la existente en el pantano del Tranco, en la Sierra de Segura, que alcanza una potencia de 39 MW, seguida pora la de Miller, el Giribaile, Guadalmena y el Jándula.
La gran importancia de este tipo de energía en Jaén se debe a la provincia de Jaén, en la que existen numerosos ríos y las condiciones favorables para la construcción de presas, en las que normalmente se ubican este tipo de instalaciones para aprovechar la fuerza de los saltos de agua.
La energía hidráulica presenta numerosas ventajas: se trata de una energía renovable y limpia de alto rendimiento energético, prácticamente inagotable y totalmente limpia, ya que su producción no emite gases ni emisiones tóxicas. Por norma general, estas centrales aprovechan la energía potencial gravitatoria que posee la masa de agua de un cauce natural en virtud de un desnivel, también conocido como salto geodésico. El agua en su caída entre dos niveles del cauce se hace pasar por una turbina hidráulica la cual transmite la energía a un generador donde se transforma en energía eléctrica.