¿Quién no conoce a Justino? El protagonista del anuncio de la Lotería de Navidad de este año. La producción de animación, que se centra en la vida de este entrañable personaje, el vigilante de una fábrica de maniquíes que se dedica a hacer más fácil la vida de sus compañeros, está intrínsecamente relacionada con un jiennense.
Mario García Arévalo, ilustrador de La Carolina, es uno de los profesionales que ha trabajado en esta producción animada. Este joven artista, a pesar de contar sólo con 27 años, es ya un profesional con una enorme proyección internacional al que recurren grandes agencias de publicidad y empresas de Estados Unidos, Reino Unido y España.
En el caso del anuncio de la Lotería de Navidad, García Arévalo ha participado en el desarrollo de varias escenas del anuncio, y su característico estilo puede apreciarse en varias escenas del anuncio más famoso de la Navidad en España. “En total, mi trabajo puede verse en unos seis segundos del anuncio. Una de las agencias contactó conmigo porque les gustaba el uso que hago de la luz y, finalmente, me contrataron como freelance para realizar parte de los concepts de los escenarios. Estoy muy contento con la gran experiencia que he vivido con este anuncio”, explica.
García Arévalo, que finalizó en 2011 sus estudios de Bellas Artes en Cuenca, vive actualmente en Valencia, donde trabaja en la empresa de videojuegos Gameloft y, además, desarrolla una importante actividad como ilustrador freelance en campos como la publicidad, la televisión o la edición de libros. Desde que recibiera en 2012 su primer encargo para una campaña publicitaria de la mítica marca de champán Moët Chandon, el ilustrador de La Carolina ha desarrollado proyectos para clientes muy importantes.
Entre otros, ha participado en un anuncio de televisión de Michelín emitido en 2014, en el que colaboró en la producción de la historia animada de una familia que atraviesa el bosque en su coche, o en otro anuncio de Coca Cola emitido en el Reino Unido protagonizado por un hombre y su perro, realizado para Nexus Productions, una importante productora británica. García Arévalo también ha trabajado para una producción de Warner Bros, así como en un libro titulado “Quiero bailar flamenco”, del Grupo Planeta, traducido a varios idiomas y del que ya se han vendido más de 25.000 ejemplares. A todo ello hay que sumar campañas para firmas tan importantes como Iberia, Wacom o el diario “El País”.
En la actualidad, el ilustrador carolinense trabaja más para firmas en el extranjero que españolas, principalmente agencias del Reino Unido y Estados Unidos, que le realizan encargos principalmente en el campo de la publicidad, “el más rentable para un ilustrador”.
Mario García Arévalo procede de La Carolina, una población que no alcanza los 20.000 habitantes y que ha visto nacer a varios artistas gráficos de proyección internacional, como Juan Francisco Casas. “No sé a qué puede deberse exactamente esta concentración de artistas de La Carolina, puede que sea porque es un pueblo con mucha actividad cultural, como concursos de pintura, o por la importancia que ha tenido el graffiti”, señala. De su infancia y juventud en la capital de las Nuevas Poblaciones destaca la figura de su padre como una de sus primeras influencias, ya que dibujaba paisajes de olivar o lugares como el Paseo del Molino de Viento, “y creo que esto pudo ser una primera inspiración para el tratamiento de la luz que hoy es la principal característica de mi trabajo”, afirma.
En cuanto a los proyectos en los que está implicado en la actualidad, Mario García trabaja en videojuegos de Gameloft para diversas plataformas, así como en varios proyectos editoriales: la segunda parte de “Quiero bailar flamenco” y un álbum de grandes dimensiones para niños, encargo de una editorial francesa. Un torrente de talento nacido en La Carolina que dará mucho que hablar en los próximos años.